Hablan de él en los telediarios y, por descontado, tampoco se ha escapado a la clásica conversación de ‘cuñados’ en los convites navideños; el Bitcoin se ha convertido en un protagonista por méritos propios y sin embargo, todavía sobrevuela un gran desconocimiento sobre este fenómeno. ¿Qué es exactamente el Bitcoin?
Bitcoint: una moneda… un tanto especial
El Bitcoin es una moneda virtual; es decir, no hay ningún estado ni banco central que la acuñe, sino que surge por la iniciativa particular de los usuarios. Tampoco hay un activo real que respalde la moneda: ni reservas de oro ni valores inmobiliarios, pero no obstante, el Bitcoin sí puede convertirse en dinero contante y sonante gracias a las agencias de cambio especializadas al efecto. Cualquier usuario puede darse de alta desde su móvil en una de ellas (la más popular es Coinbase) y tras vincular su usuario a una tarjeta de crédito/débito o una cuenta corriente, puede comenzar a operar con la moneda.
¿Puede hacernos millonarios? Sí ¿arruinarnos? También
Como es fácilmente deducible dadas las características de la moneda (sin respaldo real de activos y sin control de ningún banco central), el Bitcoin es carnaza perfecta para la especulación y de hecho, la cibermoneda se ha hecho tremendamente popular por este motivo. En este sentido, los primeros compradores de la moneda pueden considerarse millonarios ya que por un Bitcoin -en el momento en el que escribimos estas líneas- se paga ahora mismo casi 12.000 dólares; pero en realidad esta cifra se queda corta puesto que hace tan solo unos días la moneda superó los 16.000 dólares, y ahí sí que los especuladores hicieron su agosto.
La falta de regulación hace que la volatilidad sea extrema y no apta para los poco aventureros; se trata de una moneda de riesgo extremo en la que se puede ganar muchísimo dinero en cuestión de horas, pero también arruinarse en tiempo récord. De los inversores más célebres que ahora son mil millonarios nos encontramos a los gemelos Winklevoss (parte fundamental en la génesis de Facebook), que dedicaron buena parte de la indemnización ganada a Mark Zurkerberg precisamente a invertirla en la moneda, y según parece, no habrían vendido un solo Bitcoin. Teniendo en cuenta que los adquirieron a 120 dólares, que calcule cada uno la extrema ganancia obtenida gracias a la criptomoneda.
¿Merece la pena invertir en Bitcoin?
Tratándose de un activo tan tremendamente volátil y sin organismos de control que puedan intervenir para frenar una caída sin medida, nadie se atreve a hacer vaticinios sobre lo que sucederá con el Bitcoin a corto, medio y mucho menos, largo plazo. Sin embargo, los expertos advierten de los riesgos extremos que supone invertir en una moneda tan fluctuante y en este sentido, nos quedaremos con el consejo que dan algunos expertos: invertir únicamente flecos o ingresos extra que no pongan en riesgo nuestro patrimonio. En cualquier caso, ya hay voces que adelantan el colapso de la moneda y que sugieren que el refugio de los inversores se encuentra ahora en otras criptomonedas como el Ethereum o el Litecoin…